La nutria chilena en peligro

Hasta 1987, casi nada se sabía de este animal. “Dentro de la fauna de Chile era muy poco conocido, hasta que lo redescubrí cuando empecé a hacer investigaciones en la especie”, relata el académico del Centro de Investigación para la Sustentabilidad de la U. Andrés Bello. (…)
Se estima que actualmente ya no queda ni un 10% del total de huillines que había hace 200 años. Además, la inmensa mayoría de las poblaciones que habitan en ríos no cuentan con ninguna protección. “Dentro de los parques nacionales está, digamos, el 1% de los que habitan en agua dulce”, advierte y agrega que de “los ambientes marinos seguimos sin saber realmente qué está ocurriendo”, en referencia a los que viven en fiordos y canales australes.
En el pasado se la encontraba hasta la Región de O’Higgins en el norte. Sin embargo, hoy se la considera extinta hasta la del Bío Bío y, según la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), está en peligro de extinción desde La Araucanía, en el río Toltén, hasta Magallanes. Por supuesto, el ser humano ha tenido un papel clave para este escenario. (…)
La brasileña Juliana Vianna, ecóloga especializada en genética de vertebrados de la U. Católica, fue parte del estudio —junto a colegas como Eduardo Eizirik y Henrique Figueiró—y cuenta que los ancestros del huillín y el chungungo se habrían separado hace unos 430 mil años, pasando estos últimos del río hacia el mar.
“Las nutrias de Chile son las más recientes del mundo: el chungungo y el huillín”, dice Juliana sobre esta divergencia, a La Cuarta. “O sea, la adaptación del chungungo al mar fue bien rápida, lo que es bien interesante”. Ello explicaría por qué esta nutria marina “se queda poco tiempo en el agua, de hecho, pasa el 80% del tiempo en tierra”. (…)